El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro, ha recibido la Medalla de la Academia Aragonesa de Gastronomía.
En su discurso, ha destacado que el enorme potencial de la gastronomía aragonesa a la hora de configurar un destino de calidad y competitivo. «Aragón, por supuesto, se define por su territorio y su paisaje, por su herencia arquitectónica y artística, por sus tradiciones, por diez siglos de historia en común» ha recordado Soro, que ha añadido que «la gastronomía, nuestros productos, nuestra forma de cocinarlos, nuestra forma de disfrutarlos y compartirlos, constituye una parte esencial de esa identidad colectiva, de lo aragonés».
Soro ha indicado que «toda esa esencia, condensada en nuestra cocina, nos acompaña y forma parte fundamental de la experiencia, siempre sorprendente y gratificante, de recorrer Aragón, de tener la suerte de descubrir más Aragón».
En un contexto en el que el turista valora más la experiencia que va a vivir en un lugar que el propio destino, la gastronomía suma a la hora de fijar recuerdos en los visitantes «a los recuerdos de los lugares, de las emociones del viaje, se suman los recuerdos alrededor de una mesa o en la barra de un bar, recuerdos de sensaciones que se disfrutan con todos los sentidos y que se impregnan en la memoria, que potencian la experiencia turística».
El consejero ha concluido que «Aragón, nuestra forma de ser y estar en el mundo, no puede entenderse, ni conocerse plenamente, sin su gastronomía. Sin los sabores, sin los olores, sin los colores, sin los matices, que nos explican e identifican».