El Foro arroz ciervo GOC

Arroz de ciervo y puerros con pasas. FOTO: Gabi Orte / Chilindrón

El Foro –Eduardo Ibarra, 4. Zaragoza. 976 569 611− ha estrenado sus jornadas del mes de julio, las últimas antes de sus vacaciones, centradas en el arroz. Y por más que las cinco propuestas de arroz estuvieran deliciosas, el día de la comida de presentación a los medios, el protagonista fue otro plato, un sorprendente Gazpachuelo de higos brevas y tocino ibérico torrado con arándanos, que no era más que un simple −pero muy eficaz− gazpacho, donde el tomate se ha visto sustituido por unas brevas de temporada; higos son los que tomamos a partir de agosto.

Es uno de los tres entrantes que se propone en el menú de 30 euros, por más que los platos puedan seleccionarse individualmente. Esta primera parte la completan una Ensaladita de arroz basmati aderezado con aguacate, tomate, maíz, pepino y sardinas frescas curadas en casa, en la que sobresale el tratamiento de las sardinas;  el Canelón de calabacín con frutos del mar con salsa ligera de gambas. resulta muy eficaz y sabroso. Y sorprenderá a las mentes abiertas el Fricando bubulae et linguae, del que ya puede adivinar por dónde van los tiros.

La propuesta arrocera viene de la mano de cinco propuestas radicalmente diferentes, de las que el cliente ha de elegir una por mesa.  Intensa resulta la Caldereta de arroz de pescados y pulpo, y más matizado el Risotto de mar con su cococha de bacalao. Completa el apartado marino el Arroz de mar con pescado y langostino, que llegó a la mesa perfecto de punto.

Ligero y sabroso llegó el Arroz de ciervo y puerros con pasas, elaborado con la variedad senia, diferente a lo habitual. Y contundente y poderosa la Cazuela de arroz al horno de Benifaio, que completa la oferta.

 

El Foro cazuela de arroz GOC

Contundente cazuela de arroz. FOTO: Gabi Orte / Chilindrón

De postre, un homenaje a la tierra natal del cocinero, Pedro Martín, Congedus, nombre latino de Alhama de Aragón, un postre a base de melocotón y frutos rojos con helado de frambuesa y yogur, cuya acidez compensa el dulzor del melocotón y limpia el paladar tras la comida.