No han sido vacaciones, ciertamente, pero tras casi un mes de relajo, impelido por sus jefes, retoma este tapao su cita dominical. Por más que, enmascarillados y sin apenas relaciones sociales, resulte complicado encontrar sustanciosos que asuntos que traer a estas pantallas. Esta tranquilidad le sirve a uno para decirles que no, que cierra el Marpy de momento, por más que algún compañero digital se apresurará a afirmar lo contrario. Que Jorge García lo quiera traspasar, sin prisas, es otra cuestión.
Será legal, pero no parece muy ético que un periodista radiofónico, responsable de un programa especializado en campo, a su vez gestione redes sociales relacionadas con el asunto de su trabajo. Quizá por ello, no llegue a todo y se le escapen algunas veces escusas como ésta, en el facebook de Aragón Ecológico: «en la Muestra Agroecológica de Zaragoza de la plaza del Pilar, tienes la escusa perfecta para hacerte con unas buenas frutas y verduras». Salvo, eso sí, que, culto, utilice la segunda acepción del DRAE, para la escusa, con s, «provecho y ventaja que por especial condición y pacto disfrutan algunas personas según los estilos de los lugares», pensando en su propia condición.
Alguna vez hemos traído, creo, a estas páginas los fabulosos –por inciertos– mapas de productos de la página TasteAtlas, como muestra esta imagen que le lleva el aceite del Bajo Aragón y su DOP Ebro arriba, más o menos por Gallur. La última ha sido una selección de las tapas más respresentativas de cada comunidad autónoma. Las nuestras, ¡vaya usted a saber por qué! son las albóndigas de bacalao y el jamón de Teruel.
Por su parte Correos, que ha lanzado una serie de 19 sellos con platos «donde se pretende hacer un recorrido por las 19 comunidades autónomas y destacar sus mejores recetas», sí se ha asesorado más o menos, al parecer en colaboración con la Real Academia de Gastronomía, esa que lleva su facebook anclado en 2016. De Aragón aparecerá el Pollo a la chilindrón, que no es una mala elección, por más que daría pie al debate.
Mientras aquí siguen las polémicas entre la hostelería y la administración, ya judicializadas, a cuenta de las medidas para mitigar la pandemia, en otros lugares parecen ser bastante más operativos, buscando soluciones más o menos imaginativas. Además de bajada o supresión de algunos impuestos, el Gobierno británico ha decidido subvencionar a sus establecimientos hosteleros. Pagará de lunes a miércoles la mitad del precio de cualquier consumición en bares y restaurantes, sin incluir las bebidas alcohólicas –seguro que se les agotaría el presupuesto en cerveza–, hasta un límite de once euros por comensal; además el IVA se reducirá del 20% al 5% en comidas y bebidas, alojamiento hotelero y atracciones turísticas.