La Ternasca Plaza Aragón y Selvatik abren en plena pandemia
Cristian Yáñez, el especialista en ternasco de Aragón, ha abierto en la plaza Aragón. FOTO: Gabi Orte / Chilindrón.
Son muchos –demasiados– los establecimientos que han cerrado en Aragón durante los pasados meses, pero siempre queda sitio para la esperanza, dado que otros emprendedores afrontan nuevos proyectos a pesar de la pandemia y sus restricciones.
Si no podremos volver ya al Campo del Toro, Bu!, Bacharach, Zeppelin, El Morrudo, Zuco, Dommo –en Huesca–, etc, sí disfrutaremos de las nuevas propuestas, por ejemplo, de La Ternasca Plaza Aragón, El Gamberro, Gente Rara –desde el 10 de octubre–, Flor de Lis, Gorila, etc.
El ternasco de siempre
La Ternasca plaza Aragón –Pl. Aragón, 3. Zaragoza. 976 110 993– amplía las instalaciones que mantiene en el Tubo, con una enorme terraza y diferentes salones interiores para comer. Su espaciosidad permite al cocinero Cristian Yáñez ampliar su oferta de platos con ternasco, además de acercarse a otras especialidades. Estos días no hay que dejar de probar su ensalada de tomates variados, o el arroz de ternasco, setas y foie, elaborado a la brasa como el resto de sus arroces.
La brasa es una de sus armas, amén de la habilidad del cocinero para adaptar novedosas recetas al ternasco, como su Churrasco laqueado con salsa Pekín y patatas panadera. No obstante, quien desee limitarse a las migas y las costillas, también puede hacerlo, dentro o fuera, además de desayunar, almorzar y merendar a partir de bocadillos.
Para niños y mayores
Mientras los hijos disfrutan de un enorme parque infantil en Selvatik –Avda. Alcalde Ramón Sainz de Varanda, 18 (junto a C.C. Aragonia). Zaragoza. 976 974 195– los mayores disponen también de un amplio restaurante. Tal es la propuesta de Iván Acedo y Eloísa Artal, que abrió sus puertas hace unos días.
El restaurante, con cocina a la vista, se han centrado en una cocina sencilla, de corte casero y desenfadado. Una especie de encuentro entre el merendero de toda la vida y las franquicias de comida rápida, diferenciado y personalizado gracias al servicio y las propuestas propias, avaladas por el Aura y Bunkerbar. Curiosidades como los frankfurt de medio metro, pizza vegetariana con lograda masa fina, atún a la brasa en tataki, presa ibérica de Guijuelo al Oporto o el mojito en texturas.
Franchesko Vera ultimando uno de sus pensados y logrados platos. FOTO: Gabi Orte / Chilindrón
Y más
El próximo diez de octubre abrirá sus puertas Gente Rara –Santiago Lapuente, 10. Zaragoza. 686 059 973– la esperada propuesta de los experimentados Cristian Palacio en cocina y Sofía Sanz en sala. Un restaurante de alta y cuidada cocina, que viene avalada por su trayectoria en Murcia y que enriquecerá sin duda el nivel gastronómico de la ciudad.
Como ya lo está haciendo Gamberro –Bolonia, 26. Zaragoza. 696 932 781– en su nueva ubicación, con un espacio que, al fin, refleja los propósitos y la madurez de Franchesko Vera y Flor García. Un único menú degustación, a causa de la pandemia, que comienza con guiños a las tapas del bar –Huevo gamba, huevo empanado y frito, carpaccio de langostinos y kimchee casero–, para recorrer, de la mano de buenos productos, diferentes técnicas y elaboraciones. Su Secuencia de merluza y aceite de oliva, en frio y caliente, es de lo mejor que hemos probado últimamente. Técnica y sensibilidad, en un logrado ambiente.
En otra línea se encuentran propuestas como Flor de Lis, en la calle don Jaime, que pretende renovar el taperío y las raciones, sin olvidar los platos, a partir de un imaginativo uso de los productos aragoneses, a cargo de Rubén Martín. El Gorila, en la calle Ciprés, que propone un variado abanico de latas para degustar, además de quesos, vinagrillos y banderillas, sin que falte el vermut.