Sommos acaba de firmar un convenio con Aramón, por el que, entre otras acciones, sus vinos de las DOP Somontano y DOP Calatayud, pertenecientes al Grupo Empresarial Costa, estará presente en los puntos de restauración repartidos a lo largo de las cuatro estaciones de esquí de Aramón: Cerler, en el valle de Benasque, Formigal-Panticosa, en el valle de Tena, y Javalambre y Valdelinares, en el Sistema Ibérico turolense.
¿Seguro? Es cierto que el convenio no se había firmado, era un par de día antes, cuando en Formigal, Sarrios se llama el local, una esquiadora se pidió una copa del blanco de Sommos; la camarera le ofreció Enate −cuya botella estaba abierta y era el vino patrocinador en la anterior temporada−; la esquiadora la rechazó y exigió el Sommos; no lo logró… Termino bebiéndose un Mar de Frades −¡manda carajo!− en un puestecillo cercano.
Plenas navidades. Pirineo repleto de foráneos. Nuestra esquiadora, esta vez en Panticosa, Sabocos concretamente, continúa tratando de beberse su blanco de Sommos, esta vez con el convenio ya firmado. No tenemos vino blanco, le dicen, tan solo jerez para los caldos.
A ver si nuestra amiga se va a tener que pasar a la cerveza… o a los vinos foráneos.
Se nos ha ido Mariano Beroz, que fuera presidente de la DOP Somontano durante 24 años, hasta 2017. Brindaremos como el querría, siempre alegre y sonriente, con cualquier botella de su bodega, Batán de Salas.
Laminero, amén de agradecido debe ser Iker Jiménez, pues recuerda y da ánimos a «El gran Ruben de Pastelería Nava está ingresado por covid con neumonía bilateral. Es un maestro que ha endulzado a miles de personas con sus brevas y demás maravillas. Un artesano entregado a su labor. Estoy seguro que ahora necesita del afecto de los milenarios. ¡Ánimo Ruben!».
El vino Cuevas de Arom Tuca Negra 2019, colaboración entre Bodegas Frontonio y Bodegas san Alejandro, ha sido uno de los diez, y el único aragonés, tintos para un capricho de lujo, por el suplemento El Viajero, de El País.
Por su parte, Vinetur recomienda la ruta enológica por el Campo de Borja, escrita por Vilma Delgado.
Zaragoza aparece en el artículo Zaragoza gastronómica: historia de un Ave Fénix, subtitulado. Algo está sucediendo en la capital maña. De la barra a la mesa y de la mesa al festival, Zaragoza ha despertado y ahora no hay quien la detenga. Quizá algo sesgada la opinión de David Díaz, pero siempre es interesante que una publicación como Condé Nast Traveler se ocupe de la capital aragonesa.
Por su parte, Repsol se acuerda de los refugios del Pirineo oscense, en un artículo de Armando Cerra, ilustrado por las fotografías de Aránzazu Navarro, mientras que Esther Ibáñez, con fotos de Ferran Mallol, se ocupa de los turrones made in Aragón. Muy activo, Alejandro Toquero recrea la experiencia del restaurante Noloveo, donde se come a ciegas un menú degustación, se acerca al cardo de Agreda, aquí cerquita, o nos lleva al premiado restaurante Rodi en Fuendejalón.
El digital diario.es habla con el foodie Miguel Ángel Ruiz, zaragozano que confiesa que «dos de sus mejores experiencias han sido en La Senda y en Gente Rara, dos restaurantes de Zaragoza con un sol Repsol cada uno». Opinión que comparte este tapao.
Así que comenzamos el año que nos salimos. ¡A ver cómo sigue!
¡Si hasta Susana Casanova, la cocinera de La Clandestina, aparece en la revista Tapas, y en solitario como representante de Aragón, como una de las cien, Best chefs sin estrella*, seleccionada por Juan Barbacil! En la misma publicación y entre las 100 razones para gozar España, apenas aparece Bodegas Almau pro el uso del mondadientes como contabilidad de lo consumido.