La elaboración de anchoas en salmuera en Cantabria tiene su origen en los artesanos italianos que allí se afincaron, tratando de paliar la falta de capturas en sus costas. A finales del siglo XIX la tradición consistía en elaborarlas, una vez salazonadas, en mantequilla, que les confiere otro sabor.
Para disfrutarlas en todo su esplendor, se recomienda dejar la lata abierta a temperatura ambiente –es una semiconserva, que debe guardarse entre 5 y 12º C– durante 30 minutos; así la mantequilla se atempera y se queda hecha una crema muy agradable. E incluso puede reutilizarse para conferir sabor a otros platos de pescado.
Dado que técnicamente las anchoas no pueden considerarse producción ecológica, por más que la mantequilla lo sea, el producto no puede llevar el sello europeo.
Cada lata, contiene 60 gramos de producto, unos 12-14 lomos, con un sorprendente sabor, acentuado por la mantequilla.
La marca lleva el nombre del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, porque ha cedido su nombre a cambio de que el 2% de las ventas vayan destinadas al proyecto solidario La cocina económica de Santander.
Filetes de anchoa en mantequilla ecológica
CONSERVAS M.A. REVILLA. Santoña. 942 042 727. Se encuentra en tiendas especializadas. Distribuidor exclusivo en Aragón: D’Faya Foods: 665 982 448. Precio: sobre 17 euros