El Gran Hotel acogió una muestra con 18 bodegas aragonesas
GA.
Durante la celebración del Salón de los mejores Vinos de Aragón, celebrado en el Gran Hotel de Zaragoza, se dieron a conocer los que, según el amplio panel convocado por la Asociación Vinos de Aragón, presidido por el catedrático emérito Juan Cacho, son los mejores de la comunidad.
Se han distinguido doce vinos, en nueve categorías. Triple empate en el Mejor tinto con crianza, Enate Reserva Especial 2006, Enate, DOP Somontano, Essentia Reserva 2018, de Bodegas Luis Marín, DOP Campo de Borja, y Godina 2020, Bodegas Morca, DOP Campo de Borja. Por su parte, el mejor tinto joven fue Coto de Hayas Zaragoza 2021, Bodegas Aragonesas, DOP Campo de Borja.
Claraluna 2021, Valonga, IGP Valle del Cinca, resultó ser el mejor blanco joven, mientras que el blanco con crianza elegido fue Anayón Chardonnay 2021, Grandes Vinos y Viñedos, DOP Cariñena. Y de Cariñena también es el mejor rosado, Las Margas Vidadillo 2021,de Bodem Bodegas.
Empate también en los vinos dulces, compartido por Moscatel Gran Palafox, Bodegas Larre, IGP Ribera del Gállego – Cinco Villas, y Sofía Blanco Dulce 2021, de Valonga, la única bodega con doblete. Por su parte, Aromas del Pilar 2021, Bodegas Hermanos Torcal, DOP Cariñena, resultó ser el mejor vino de licor.
Mejor espumoso, el Secret Reserva Brut Nature, Chapillon, elaborado en Calatayud al amparo de la DOP Cava, y mejor vermú, Valdepablo Gran Añada, Bodegas Valdepablo, también de la DOP Calatayud.
Premios muy repartidos entre todas las denominaciones e IGP’s, aunque destaca la de Cariñena, con cuatro menciones.
También fueron premiados, gracias a sus cartas de vino, cada uno en su categoría el restaurante Callizo, en Aínsa, y el Rincón de Sas, en Zaragoza.
Dos imprescindibles
Especialmente emotivos resultaron los dos reconocimientos a profesionales del mundo del vino, que obtuvieron los más entusiastas aplausos. El enólogo Jesús Navascués, de larga trayectoria recibió el primero. Con más de sesenta vendimias a sus espaldas, ha trabajado en la práctica totalidad de las denominaciones aragonesas y en otras españolas, dejando en todas las bodegas la impronta de su bonhomía y buen hacer con el vino.
Por su parte, Manolo Bona, desde su bar, El Fútbol, en el zaragozano barrio de Torrero, se puede considerar, sin ningún género de dudas, el mayor valedor del vino aragonés. Más de 350 referencias de vino aragonés se agolpan en sus anaqueles y todas las ha probado. Sin duda, nuestro mejor escaparate, donde el único ribera que se puede beber allí es del Jalón, del Jiloca o del Gállego.
El salón
Durante todo el día, dieciocho bodegas, desde las más grandes de la comunidad, hasta otras diminutas, mostraron sus novedades y sus premios en el salón creado al respecto, restringido a profesionales por la mañana y abierto al público en general por la tarde.
Una muestra de productos aragoneses, amparados por Slow Food, y las conservas de Gardeniers, completaban la oferta del salón.