Llegan al mercado la gama 3404 de la bodega del Somontano
y el Palmeri Navalta 2018
GA.
Bodega Pirineos, perteneciente al Grupo Barbadillo, presentó las nuevas añadas de su gama 3404, compuesta por la gama completa de blanco, rosado y tinto. Con la compañía de su director de comunicación, Javier Fillat, Manuel Zorita, jefe regional, y
Javier Colás, responsable comercial, se pudo apreciar el estilo de estos vinos, que responden a la apuesta de la casa por crear unos vinos que responden al «paisaje, la naturaleza, sus suelos y el clima bajo la gran influencia de los imponentes Pirineos».
Aromas, fruta y dulzor definen el 3404 Tinto joven, un vino moderno, con raíces, con expresión y diferenciación. Un vino versátil, vitalista, de una calidad reconocida y que ofrece seguridad, elaborado con las variedades tradicionales moristel y garnacha, acompañadas de un merlot muy bien aclimatado al Somontano. Como explica Jesús Astrain, enólogo de la bodega, «se vendimian priorizando la fruta sobre la concentración y se utilizan levaduras autóctonas seleccionadas que permiten conseguir una mayor expresión de la tipicidad del Somontano». La merlot aporta más dulzor en la boca, llenando mejor el vino y aportando una fruta sin carácter vegetal. El resultado es un vino de color rojo intenso, fresco, con aromas marcados de fruta de hueso.
Por su parte, la mezcla de chardonnay con gewürztraminer en 3404 Blanco se presenta con una nariz fresca y cítrica donde las variedades se funden en un solo vino aportando cada una de ellas matices como flores blancas embriagadoras, rosas silvestres, vainillas, lima y hierbabuena. La boca es suave, cremosa, con una rica acidez que acompaña al vino y lo hace más apetecible. Un vino blanco para disfrutar de toda la riqueza de los blancos del Somontano.
Finalmente, el 3404 Rosado joven, presenta aromas frescos y afrutados y una sorprendente boca llena de sabor, gracias a la combinación de tempranillo y cabernet con las que se elabora, y se muestra muy explosivo en aromas.
Garnachas de altura
Por su parte, la bodega de Tabuenca Palmeri Siclia, DOP Campo de Borja, presentó la nueva añada de su Pameri Navalta, correspondiente a 2018. Un vino que ya han podido certificar en ecológico tras un proceso que comenzó en 2014.
Es el vino emblemático de los hermanos Cuartero, David, Eduardo y Rafael, del que salen al mercado 27 000 botellas. Procedente de viñedos situados a más de 700 metros, con un bajo rendimiento, ha madurado un año en tinas de 5000 litros, otro en barricas de roble francés y americano, y uno más en botella, para conseguir toda la potencia y elegancia que esconden estas garnachas de altura.
Con aromas de frutos rojos –moras y guindas–, en boca destaca su frescura y potencia, de forma que su graduación alcohólica –15%– apenas se aprecia. Unos taninos maduros y elegantes, acompañan a su largo final, donde vuelve a aparecer a fruta.
Pero no fue el único vino que se probó. Como primicia, presentaron su blanco experimental, elaborado como si fuera un tinto, que ha permanecido un año en barrica. Poderoso, de alto color, promete ser un descubrimiento cuando llegue a la calle. También eñ Adán, ese vino especial que no puede salir con una frecuencia menor a los tres años. Pues madura ese tiempo en unas barricas ubicadas en una galería de la cueva integrada en la bodega, dadas sus especiales condiciones climáticas. Y hasta vaciarlas para embotellarlas, no se puede introducir una nueva añada. De ahí que este Adán 2018 venga a reemplazar al anterior, de la añada 2015, y que haya que esperar al menos tres años más hasta la próxima partida, mientras la cueva no se pueda ampliar.