En 1984 nace la Denominación de Origen Protegida Jamón de Teruel, la primera denominación de origen de España destinada a proteger y garantizar la producción de este alimento. Casi cuarenta años después, continúa ofreciendo calidad y tradición, siendo uno de los productos más destacados de la gastronomía aragonesa y su despensa.
Desde la cría del animal hasta el secado del jamón de capa blanca, todos los procesos de elaboración del jamón de Teruel DOP deben realizarse en la propia provincia, lo que supone un importante respaldo para el mantenimiento de empleo en el medio rural en diferentes puntos de la cadena de valor, como la ganadería o la restauración.
Uno de los elementos clave para conseguir un resultado de gran calidad es la raza. La línea materna debe proceder de las razas Landrace, Large-White o el cruce de ambas, y la paterna debe ser puramente Duroc. Las primeras otorgan una carne definida fundamentalmente por la jugosidad, textura, conformación y color, mientras que la segunda permite una óptima infiltración de grasa. Estos animales se alimentan de cereales cultivados en los campos de Teruel y en zonas limítrofes, lo que proporciona una alimentación equilibrada y sostenible.
Otro es su curación. Las bajas temperaturas que brinda la climatología turolense permiten que el jamón de Teruel DOP realice un secado de forma más lenta – con una curación mínima de 14 meses para el jamón y de 9 para la paleta – y, por lo tanto, necesite menos sal. Por ello, su sabor es sutil, con un gran aroma, textura suave y un color rojo de aspecto brillante al corte. Junto con su grasa, untuosa al tacto, aromática y de agradable sabor, conforma un producto único de calidad garantizada que no puede faltar en la mesa.
Reconoce el auténtico jamón de Teruel DOP por su estrella de ocho puntas marcada al fuego en la parte posterior del jamón, acompañada de la palabra Teruel, la conservación de su pezuña, en señal de su calidad, su vitola numerada con el logotipo de la DOP y el código de trazabilidad.
Es un producto de excelente sabor, que genera empleo en el medio rural y mantiene la tradición y la cultura del cerdo turolense de forma sostenible. Impulsa la economía gracias a la producción, pero también la hostelería y el turismo que llaman la atención de visitantes que desea probar algo tan nuestro, y que se cura con el frío seco de Teruel, como el jamón de Teruel DOP recién cortado.
Si tu también quieres disfrutar de la estrella del jamón, puedes encontrar en la página web oficial de la denominación diferentes puntos de venta físicos y online.