Verano de cambios. Tras la espantada de Vox del Gobierno de Aragón –al menos del vicepresidente Nolasco–, el presidente Azcón decidió prescindir del consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Ángel Samper. Que al parecer, quería seguir en el cargo y, de hecho, le pidió a su jefe que le dejara reflexionar a lo largo del fin de semana. Mas no, fue cesado. Se publicó primero que a petición propia, pero luego se rectificó; quería seguir e incluso ofreció una inusual rueda de prensa para explicarse. El exdirigente de Asaja, independiente en el momento de su nombramiento el pasado año, se había afiliado al partido que lo nombró a principios del verano, para darse de baja poco después –¿quizá su condición de acendrado católico le impedía compartir el cruel discurso de su ya expartido acerca de la inmigración?–, ya ha vuelto a la vida civil. Como alguno de sus nombrados, pues a la fecha de cierre de este tardano número, no se había completado la habitual renovación de los directores generales. Dada la tranquilidad con que se abordaban los asuntos en su departamento, poco legado deja, más allá de alguna declaración salida de tono, especialmente las relacionadas con las ya –parece–– olvidadas movilizaciones de agricultores y ganaderos.
Habrá que esperar a que el nuevo, consejero Javier Rincón vaya nombrando su equipo. Llega al cargo un funcionario tranquilo y dialogante, que ya fuera Secretario general técnico del departamento en tiempos de Modesto Lobón –ese consejero para el que cuesta encontrar alguien que hable bien de su gestión, especialmente entre los militantes de la derecha– que, de momento ya ha tenido que enfrentarse con la crisis de la lengua azul −¿de verdad tanto van a tardar las vacunas? ¿Quién es el culpable de este desabastecimiento anunciado?
Nos parece perfecto que el Gobierno de Aragón y otras administraciones aprovechen la mínima aglomeración de personal, especialmente si es foráneo, para promocionar nuestro turismo, gastronomía y alimentos nobles. Lo han hecho en el Vive Latino y lo tendrían que repetir a la menor ocasión.
Pero con coherencia, ya que no deja de ser un contrasentido que, mientras el poco aprovechado expotrailer de Aragón Alimentos Nobles se desplazara a Motorland para promocionarlos, quien sea haya contratado a Rafel Muria, estrella Michelin en el restaurante Quatre Molins, sito en Cornudella de Montsant. Cierto es que la empresa Vilaplana Catering, responsable esta temporada de la experiencia culinaria del MotoGP VIP Village, no parece aragonesa, por lo que quizá ignore que aquí también presumimos de estrellas: una en Teruel, tres en Zaragoza y cuatro en Huesca. Para mayor dolor, Motorland que fue responsable del turismo municipal zaragozano en la pasada legislatura, lo es ahora de marketing y comunicación de Motorland. ¿Se le ha olvidado lo que opinaba hace poco más de un año, cuando había que promocionar lo de casa?
El estrellado Ramsés González está que se sale. Su idilio con Agatha Ruiz de la Prada, que diseñó hace unos meses los uniformes del chef, se mantiene incólume. En la revista Hola, en su apartado de gastronomía, la diseñadora adapta una receta del cocinero aragonés, que está reivindicando sus orígenes cubanos. Se trata de Tomates de ayer, hoy y mañana, jugo de tomate verde, hierbas y granizado. Y opta por su restaurante como uno de sus tres favoritos: «Cancook, de Ramsés González Méndez, en Zaragoza; Fierro, de Carito Lourenço, en Valencia, y Table, de Bruno Verjus, en París, elegido el tercer mejor restaurante del mundo».
Por cierto, el cocinero prepara la «apertura de dos nuevos establecimientos en el Hotel Santa Ana de Tudela. Para uno de ellos, Árido, ubicado en la bodega del edificio, aspira a conseguir su segunda estrella. Y mientras tanto, su otra marca Es.Table abandona la Romareda, donde obtuvieron la estrella, para instalarse muy cerca de donde comenzó todo, en la calle Moneva, cuando eran tres socios. El restaurante busca ampliar el elenco de clientes y ofrecerá platos a la carta además de los imprescindibles menús, degustación o ejecutivo.
Zaragoza y Valladolid se han aliado para crear un Concurso de tapas en Aragón. Perfecto, pero que no se empeñen en decir que es el primero. De la misma forma que el primer Concurso nacional de tapas de España tuvo lugar en Zaragoza –hace muchas décadas, en el Hotel Boston, cuando internet era para una minoría–, el autonómico ya se celebró, enmarcado en el festival Aragón con Gusto. Y entonces ya usábamos masivamente las redes.
Ya que las hemerotecas apenas se visitan, busquen en Google. «La primera edición del Concurso oficial de tapas de Aragón. De ahí saldrá la mejor tapa aragonesa del año 2013, que representará a nuestra comunidad en diversos certámenes y eventos, tanto nacionales, como internacionales. Un evento que reunirá a los cinco mejores establecimientos de cada una de las provincias aragonesas, precisamente los que ha ganado sus respectivos certámenes de tapas», como se puede comprobar en la web de Heraldo de Aragón. El concurso tuvo continuidad, hasta que desapareció el citado festival y se lo llevó por delante.
Por cierto, tapa y consumición salían por 2,50 euros.
Dado que hay de dotar de contenidos a las redes, sea como sea, aparecen numerosos errores. Es el caso de un página centrada en la gastronomía zaragozana, que aprovechaba la celebración del día de la cerveza –el pasado viernes– recomendando diez bares para celebrar el día de la cerveza en Zaragoza. Aunque cita correctamente establecimientos como Hoppy, Gastrópolis –donde oficia el colaborador de Gastro Aragón, Fernando Montes–, Ordio Minero, La Malteadora, Beer Corner, La Cebada, El Museo de la Cerveza, Taberna William Wallace y Beerland, se olvida que, tristemente, Cierzo Brewing Co cerró sus puertas hace algunas semanas.
Y como las mentadas redes reproducen cualquier cosa tal cual, cada vez más llegan notas de prensa, no ya inciertas, sino inverosímiles. Esta, procedente de TikTok no tiene desperdicio. Tras el explosivo titular: «El 96% de los aficionados a la cocina en España eligen TikTok como fuente de inspiración», vienen perlas como «Y es que TikTok se ha convertido en la plataforma de referencia para los amantes de la comida en España, con un 96% de los foodies buscando inspiración culinaria en la plataforma». O «la plataforma no solo inspira a los usuarios a cocinar más, sino que también impulsa la experimentación con nuevos productos y marcas. Un 76% de los usuarios se anima a probar cosas nuevas tras ver contenido gastronómico en TikTok, y un 73% se siente inspirado por la creatividad de los creadores». Eso sí, citan la fuente, que, nada casualmente, es propia: TikTok Marketing Science ES FOOD Survey 2024, conducted by AYTM.
Un hostelero zaragozano, que no se suele esconder, escribió recientemente a propósito de su participación como jurado en la primera fase del oscense Concurso Tapas de 10. «Mucho nivel el demostrado por todos los compañeros participantes. Y un gran honor formar parte de este jurado de grandes profesionales de la hostelería. Ejemplo a seguir en Zaragoza en la que parece que está de moda que sean políticos y del mismo partido quienes juzguen nuestras propuestas».
Uno no es experto en mercadotecnia pero no sabe si es buena idea que el decano de la prensa aragonesa haya regalado, con motivo de su Suplemento especial San Lorenzo 2024, una botella de vino… del Campo de Borja. ¡Pues no son nada suyos los de Huesca!
Rentable les está saliendo a Julia Pérez Lozano y José Carlos Capel –al parecer despedido de forma telefónica de El País, donde conformó su influencia a lo largo de muchos años– el viaje de prensa auspiciado por los hosteleros oscenses, en unas jornadas maratonianas, con comida, merienda y cena, e incluso abrieron algún restaurante para que desayunaran allí y lo conocieran. Ella ha publicado en Gastroactitud una Ruta Gastro por el Pirineo aragonés –nada que objetar a la selección pirenaica, aunque sí la del resto de la provincia–. Él, de momento, ya ha firmado dos artículos El famoso pastel ruso de Ascaso y Cocina aragonesa reinterpretada por el cocinero Toño Rodríguez que fusiona tradición y modernidad en un entorno pintoresco.
El colaborador de Gastro Aragón, Joan Rosell no se limita a cocinar –que es su oficio y en breve nos dará alguna agradable sorpresa–, escribir libros y artículos para el bimestral. Utilizando la inteligencia artificial ha compuesto la canción Ven a Sádaba, sobre las fiestas de la localidad de las Cinco Villas, su lugar de adopción. Y amenaza con utilizarla en los fogones.
El editor de estas páginas es uno de los que aparecen en la sección Pollerías (verano 2024) de la web El Pollo Urbano. Escriben que dijo, como una de las ilustre personas que acudieron a la zaragozana Feria de libro –este tapao ha podido constatar que hace décadas que no acude a ninguna–, lo siguiente: «Dicen los expertos que un pueblo que no se ilustra corre el riesgo de embrutecerse. Pero seamos realistas, pues un pueblo que no tiene nada que leer no es en absoluto más peligroso que aquel otro que carece de algo para masticar. ¿Alguien duda de que al pueblo llano se le calienta la cabeza justo cuando se le enfría la cocina?». Consultado, no reniega de las palabras que jamás dijo, pero sí del calificativo crítico gastronómico, con el que le adjetiva. Y se ofrece para aportar alguna foto más actual, pues no quiere remedar a Jordi Hurtado: ¡La imagen es de hace catorce años!
¿Le han echado mal de ojo al Festival Vino en la Calle?
¿Cuántos más de los nuevos kioscos desaparecerán?
¿Cuándo se modernizará nuestra hostelería?
¿Triunfará el nuevo enfoque de la que fue Puerta Cinegia?
¿Resistirán los alimentos nobles con un tercer consejero?
¿Cierre por mantenimiento a los quince días de la apertura?