Es curioso que socialmente se celebren con más entusiasmo los acontecimientos que coinciden con lustros, décadas, centenarios, etc. o cifras que denominamos redondas.
En este número de Gastro Aragón que tiene entre sus manos, se cumple lo anterior. Como podrá comprobar es el número 100. Llegar a centenario con una revista de cultura gastronómica y de carácter regional es mucho más que meritorio, es milagroso. Y ese prodigio se debe a cada uno de ustedes: lectores, suscriptores, colaboradores, anunciantes…, que mantienen a flote este singular proyecto, dirigido con mano sabia por el inefable José Miguel Martínez Urtasun Si hubo un Cien años de soledad de Gabriel García Márquez, si Mama cumple cien años para Carlos Saura, para nosotros también hay un cien de Gastro Aragón que bien se merece un sobresaliente, un diez.
Y, como en toda celebración que se precie, se brinda; yo les invito en este artículo a que lo hagamos con nuestra bebida, para ello, les propongo diez cervezas, seguimos con números redondos, de diferentes estilos que, según mi criterio personal, están a la altura de tamaña efeméride.
Huyendo de todo dogmatismo, elegiré cervezas que ustedes puedan encontrar, mentiría si dijera que fácilmente, pero sí, sin excesivas dificultades. Me guiaré, asimismo, por escogerlas entre estilos de cerveza que todos reconocemos y que son ampliamente aceptados por la mayoría de los consumidores.
Y para empezar, nada mejor que con unas lager. Y dentro de este tipo de cervezas, elegiría una de estilo pilsen que sería la Tipopils, del Birrificio Italiano, y otra de estilo bock, que sería la Celebrator, doble –doppel– bock de la cervecera bávara Ayinger.
Para ir acomodando nuestro cuerpo a la celebración, les propongo seguir con unas cervezas de trigo y de entre ellas elegiría una alemana y otra belga, una weissbier y una blanche o wit. De la teutona me inclinaría por la Weihenstephaner Hefeweissbier y en cuanto a la belga optaría por la St. Bernardus Wit.
Qué les parece, si atravesando este ecuador, nos tomamos un respiro y nos vamos al silencio de un monasterio. Y si éste es de la Orden Cisterciense de la Estricta Observancia, para los amigos Orden de La Trapa, tanto mejor. Nos postraremos ante los dos estilos clásicos de las cervezas de abadía, las dobles –Dubbel– y las triples –Tripel–. Y de la primera mi elección sería la Westmalle Dubbel, en cuanto a la segunda, me aparece la duda. Les recuerdo que estamos en un lugar de fe, por lo que la duda es inevitable y sana. Si seguimos intramuros, me rindo ante la Rochefort Triple Extra, pero si mi elección es más de este mundo opto por la Dupont avec les bon voeux.
En estos tiempos que corren tan influidos, para bien y para mal, por las modas, no nos tendríamos que olvidar de las IPAs. Este renacido tipo de cerveza ocupa un importante lugar entre los aficionados y sería absurdo que no ocupara un lugar en esta celebración. Creo que sería justo que, dentro de lo más clásico del estilo, una de las cervezas a nombrar fuera la famosa Punk IPA de la cervecera escocesa Brewdog y reconocer que aquí en Europa, con ella empezó todo. Me gustaría nombrar otra cerveza que desde mi primer encuentro con ella me viene seduciendo y conquistando paulatinamente, es la bruselense Brussels Calling de la Brasserie De la Senne. Una IPA en manos de cerveceros belgas, ¿puede haber mejor combinación?
Y terminaremos con algo negro. Sé que no viene siendo un tipo especialmente popular en nuestros lares, pero va ganando adeptos por lo que creo que merece un lugar en este festejo. Empezaré por una porter, y viajamos a Londres, ¿dónde si no?, y me quito el bombín ante la London Porter de la cervecera Fuller’s. Viajamos al norte, a Yorkshire, antigua zona carbonífera, a por la stout, la más negra entre las negras, la tinta del txipirón. Y esta es la Imperial Stout de la cervecera Samuel Smith.
Comprobarán que en la elección de cervezas, absolutamente personal, no hay otro criterio que el que me concedo, no he incluido elaboraciones nacionales, ni autonómicas. Estas me las guardo para próximas entregas que espero tengan ustedes a bien atender.