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La provincia de Huesca, mejor relación calidad precio por habitante de la gastronomía en España

La propuesta culinaria y gastronómica de Huesca multiplica por 10 la ratio de negocios incluidos en la última edición de la prestigiosa Bib Gourmand

Ambiente entre compañeros hosteleros de Huesca. Foto: Hostelería Huesca.

La provincia de Huesca cuenta con poco más de 225,000 personas, menos del 0.45% de la población española, y una densidad de población de apenas 14 habitantes por km². Esto la convierte en una de las provincias más despobladas de España, con 55 veces menos población que la Comunidad de Madrid y 51 veces menos que la provincia de Barcelona.

Sin embargo, su propuesta de restauración rompe la estadística con datos sorprendentes: ha situado nada menos que a 10 restaurantes en la prestigiosa lista Bib Gourmand, lo que representa un 4.4% del total de 229 propuestas nacionales. Esto equivale a que Huesca cuenta con tantos restaurantes en esta lista como los seleccionados de todo el País Vasco y Navarra juntos. En otras palabras, la oferta culinaria y gastronómica oscense multiplica por 10 la ratio que le correspondería por población, superando con creces las limitaciones demográficas de la provincia.

La lista Bib Gourmand reconoce a los restaurantes y negocios gastronómicos que ofrecen mejor relación calidad/precio, y de hecho se considera esta lista como la ‘antesala’ de las futuras estrellas Michelin. Comparado con otras regiones culinariamente reconocidas de España, Huesca alberga la mejor ratio de la gastronomía de España. Todo ello la convierte en una opción gastronómica muy atractiva tanto para locales como para turistas. La clave está en el equilibrio entre la alta calidad de sus productos y la accesibilidad de sus precios.

Iris Jordán celebra su premio en el concurso provincial de tapas. Foto: Hostelería Huesca.

Profesionales reconocidos

La provincia de Huesca cuenta con enormes reconocimientos a sus profesionales que lo colocan en los más destacados puestos de la cocina en Aragón e incluso en España. Sirvan solo algunos ejemplos aunque no están todos los que son, sino únicamente aquellos que han logrado reconocimientos de carácter más reciente.

Toño Rodríguez es un chef español reconocido por su creatividad e innovación en la cocina. Originario de Jaca, es propietario del restaurante La Era de Los Nogales, establecimiento situado en una localidad de 37 habitantes, y ha logrado destacarse en el panorama culinario por su enfoque en la gastronomía tradicional aragonesa con un toque vanguardista. En 2024 ha conseguido los siguientes premios: Cocinero del Año 2024; Bib Gourmand y Sol Repsol. Además, Toño Rodríguez es un habitual en programas de televisión y festivales gastronómicos, donde presenta su visión de la cocina moderna arraigada en los sabores tradicionales de Aragón.

Iris Jordán es una chef española que ha destacado por su talento en la creación de tapas y ha ganado importantes reconocimientos en la gastronomía. En 2024, fue galardonada con el premio “Mejor Tapa”, que se otorga al mejor cocinero especializado en tapas a nivel nacional por Hostelería de España en el marco de Madrid Fusión. Su tapa ganadora fue un reflejo de su estilo culinario, combinando innovación y respeto por la tradición del territorio y con una decidida apuesta por la sostenibilidad. Además, Iris Jordán fue reconocida con el tercer premio a Cocinera Revelación en Madrid Fusión 2024, uno de los eventos gastronómicos más prestigiosos de España. Este galardón es entregado a chefs emergentes con un gran futuro en la gastronomía. El jurado valoró su creatividad, técnica, y capacidad para reinventar los sabores locales en propuestas modernas y sorprendentes.

Raúl Bernal fue galardonado con el título de Mejor Maestro Chocolatero de España en 2023 y Mejor Bombón Artesano. Recientemente también se ha hecho con el reconocimiento a una de las mejores pastelerías del mundo que otorga Relais Dessert. Sus ingeniosas elaboraciones las pueden probar en Lapaca en Huesca.

Y la nómina de profesionales continúa con los estrella Michelín Carmelo Bosque (Lillas Pastia- Huesca), Tonino Valiente (Tatau- Huesca), Eduardo salanova (Canfranc Express- Canfranc) y Josetxo Souto y Ramón Aso (Callizo- Aínsa).
La nómina de principales profesionales la contemplan los mencionados 10 restaurantes Bib Gourmand y otros tanto soles Repsol que situán a esta provincia altoaragonesa como la mejor relación-calidad precio de España. Una contínua apuesta por la excelencia para mejorar el altísimo nivel de la hostelería de la provincia y que se completa a la perfección con los magníficos paisajes que tiene Aragón y especialmente esta provincia que alberga el mejor destino de aventura de Europa, el desierto más vivo del continente y las magníficas montañas que conforman el Pirineo Central.

Tapas de proximidad de La Era de los Nogales. Foto: Hostelería Huesca.

De Huesca al mundo: cocina de Km.0 con prestigio internacional

La cocina rural en la provincia de Huesca tiene una gran importancia tanto cultural como económica. Aquí algunos puntos clave que resaltan su relevancia:

  1. Tradición y patrimonio gastronómico: La cocina rural de Huesca está profundamente arraigada en las tradiciones y costumbres de la región. Platos como el ternasco de Aragón, las migas, las sopas de ajo y productos locales como quesos artesanales y setas, forman parte de un patrimonio culinario que refleja la identidad de la zona.
  2. Productos de kilómetro cero: En Huesca, los productos de la tierra son protagonistas, con un enfoque en la sostenibilidad y la agricultura local. Las pequeñas explotaciones agrícolas y ganaderas rurales producen alimentos frescos y de calidad, como hortalizas, carnes y embutidos, que son la base de muchos platos tradicionales.
  3. Atracción turística: La cocina rural de Huesca es un atractivo turístico que complementa el paisaje natural y cultural de la provincia. Muchos turistas visitan la región no solo por su belleza natural (Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Guara, Posets Maladeta, Parques Occidentales), sino también por la gastronomía. Las rutas,
    restaurantes rurales y ferias culinarias atraen a visitantes que buscan una experiencia
    auténtica.
  4. Economía local: La gastronomía contribuye a la economía de Huesca, generando empleo en sectores como la hostelería, la producción agrícola y la transformación de alimentos. Los pequeños restaurantes y cooperativas de productos locales dependen de esta cadena alimentaria para sostener a las comunidades locales.
  5. Dieta saludable y productos de calidad: La cocina tradicional está basada en ingredientes naturales, muchos de ellos ecológicos. Esto no solo promueve hábitos alimenticios saludables, sino que también fomenta una mayor apreciación por la calidad y el origen de los alimentos, impulsando la economía circular y el comercio justo en el ámbito rural.
  6. Vinculación con la naturaleza y sostenibilidad: En muchas zonas rurales de Huesca, la cocina refleja una relación directa con la tierra y los ciclos naturales. La recolección de setas, la caza y pesca locales, así como el cultivo de productos autóctonos, forman parte del sistema de autosuficiencia de la cocina rural, lo que contribuye a un estilo de vida más sostenible.

La cocina de la provincia de Huesca, por lo tanto, es un tesoro cultural y un pilar económico que fortalece el tejido social de la provincia, conectando a sus habitantes con la tierra y sus tradiciones mientras atrae a visitantes en busca de autenticidad gastronómica.

Propuestas durante todo el año

Todos los argumentos mencionados anteriormente configuran un territorio gastronómico especial, en el que la implicación de establecimientos, cocineros y profesionales de sala, apoyados por una notable oferta de alojamiento (más de 80.000 plazas hoteleras y extrahoteleras en la provincia), contribuyen a crear una atmósfera única durante todo el año.

Por ello, existen propuestas para disfrutar según los productos o las estaciones. En primavera, las verduras de temporada son protagonistas; en otoño, las setas, la caza y la carne del Pirineo toman el relevo. Durante los 365 días del año, destacan las buenas barras de tapas, que se complementan con eventos puntuales como las jornadas gastronómicas, los juepinchos o los concursos provinciales, de los que han surgido campeones algunos de los mejores chefs mencionados anteriormente y otros igualmente reconocidos en certámenes de cocina en miniatura. También se celebran concursos en los que platos emblemáticos como el pollo al chilindrón o los asados de Ternasco de Aragón, dos pilares de la gastronomía altoaragonesa, ocupan un lugar destacado. El recorrido concluye con una ruta dulce en la que los postres, protagonistas reconocidos en congresos nacionales, también tienen su espacio.

Este completo menú se sustenta en dos elementos clave: una envidiable sintonía profesional y una destacada colaboración público-privada entre la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Huesca, la Diputación Provincial de Huesca, Turismo de Aragón y el Gobierno de Aragón.

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