Este tapao se jubiló hace un mes. Y sí, seguirá emborronando estas pantallas, pero no se imagina lo fatigoso que resulta estar en esta condición. Falta tiempo para todo.
Parece que este 2025 va a estar repleto de vino, al menos en Zaragoza −garnacha− y Cariñena. No estuvo invitado este tapao −¿cómo, si uno se mantiene en la clandestinidad?− a la gala inaugural de Cariñena Ciudad Europea del Vino, que se celebró en el cine teatro Olimpia de Cariñena, donde tantas películas proyectó en otros tiempos.
Agazapado entre los curiosos vio llegar a todos los jefes −no faltó ninguno, al contrario que la entrega de los premios Horeca, de los que hablaremos la próxima semana−, varios de los cuales tenían reservado su rato de gloria sobre el escenario.
Según le contó después un viticultor que allí estaba, fue especialmente radical el presidente de la DPZ, Juan Antonio Quero, que vino guerrero. Saludó a las muchas autoridades presentes con calificativos más o menos cariñosos –amigo, querido, compañero, etc.–, salvo a la segunda de la comunidad, mujer ella, y parece que no lo hizo no precisamente por machismo. Luego se vino arriba ofreciendo más dinero para el sector, con un discurso algo provocador, que no logró que el presidente Azcón entrara al trapo. Eso sí, mi infiltrado comentó que fue un detalle que se acordara de los viticultores, alusión muy bien recibida por los pocos que estaban en el patio de butacas.
Presentadores de la zona y actuaciones musicales de la tierra, por más que el pianista no fuera hace ya muchos años precisamente amable con la DOP Cariñena, según le comentaron posteriormente a este tapao.
Pues en el buen cóctel que se ofreció en la Bodega Tierra de Cubas, que estrena concesionario–, uno sí se coló. Y podría haberse hecho pasar por periodista, incluso influencer, pues apenas los había por ahí. ¿No los habían invitado? O quizá porque era sábado y a pesar del autobús que ofreció el Ayuntamiento de Cariñena pasaron del evento. ¿Nuestros pueblos no tienen glamour?
Vino no, pero uva sí hay −mejor escrito, habrá cuando comiencen a fructificar los brotes− en la Capital mundial de la Garnacha, pues ya se han trasplantado las cepas de garnacha al parque de Macanaz. Lo que sirvió para que, al menos ocasionalmente, la izquierda municipal recuperara la ironía, de la mano de la concejala de ZEC, Elena Tomás, que afirmaba que «con este criterio, cualquier día anuncian que van a plantar cannabis sativa y se quedan tan anchos». En cualquier caso, más fácil resultaría hacerse un porro que vino de esas garnachas.
Y en estas llegó el comandante Peñín y mandó aparar. Bajo el amparo del Gobierno de Aragón organizó el I Salón Peñín de Vinos de Aragón, que funcionó muy bien, lo que indica que el sector quiere/necesita citas como ésta para reunir a bodegas con los profesionales del sector, desde los distribuidores a los hosteleros. De hecho, la cita, a petición de los elaboradores de vino, se repetirá el próximo mes de octubre en Madrid. Toda promoción es poca, especialmente cuando los trumpianos aranceles –sobre los que escribiremos en posteriores entregas– amenazan profundamente al sector.
El evento que tuvo que limitar el número de invitados, ante lo exiguo de la sala Goya II de la sede del Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación en la zaragozana plaza Nolasco. Y, afortunadamente, la afluencia fue escalonada, con lo que apenas hubo apretones en los pasillos.
Pero Zaragoza, y probablemente otras localidades aragonesas, sigue necesitando una feria del vino destinada al gran público.
Porque la interesante Feria de Montañana, de nombre oficial feria de los Vinos de Aragón, es cada vez más un evento local. El Salón de los vinos de Aragón ha logrado concitar, por decirlo de forma elegante, la indiferencia del sector, en apenas tres ediciones. Y el festival internacional de la garnacha, que incluye otra feria de vino, para el mes de junio, según se anunció, se limita a la provincia y las garnachas. Por no nombrar otras citas, necesarias, pero más sectoriales, amparadas por denominaciones de origen e indicaciones geográficas protegidas.
Son muchos, de edad provecta ellos, que añoran eventos generalistas como la fenecida Muestra de los Vinos de Aragón, organizada por Isidro Moneva y el editor de estas páginas, a causa de la crisis del 2008.
Tendremos que decirle al editor, que de negocios y ganar dinero sabe menos que poco, que debería abrir una nueva sección en su bimestral y las redes. Algo así como los anuncios por palabras tan habituales hace unas décadas para atender a la amplia oferta de traspasos que se está dando en el sector. Y no hablamos precisamente de los que se quieren jubilar.
Pues son muchos quienes abren un negocio sin especial conocimiento del sector y buscan que ese trapaso minimice las pérdida.
¡Por fin abre una tienda que no es franquicia en la zaragozana calle Alfonso! Setrufma es el proyecto de tres hermanos de Cantavieja, Cristina, José Enrique y Sergio Gil Gascón, cuarta generación de truficultores. Tras crear una tienda virtual –– han dado paso a la física.
Eso sí, a pesar de su nombre afortunadmente no se dedican únicamente a la trufa fresca, ya que la temporada acabó el pasado 15 de marzo. Ofrecen productos trufados, sí, pero también artesanos procedentes de todo Aragón, son especial atención a los turolenses.
Parece que todo vale a la hora de captar la atención en las pantallas, de forma que crecen los titulares engañosos, cuando no falsos, para captar visitas y clicks. Uno de libro: El nuevo restaurante favorito de Matías Prats, en la frontera de Aragón, publicado por Aragón Hoy, cada día más sensacionalista. Si uno comete el error de entrar descubrirá que se trata de Mugaritz, ubicado en Errenteria, a poco más de 150 kilómetros de Sos del rey Católico, por citar una localidad aragonesa fronteriza.
Menos fuerte, pero también engañoso resulta Restaurante Gamberro: el sabor neobaturro que merece una escapada a Zaragoza, reportaje que publica Clara Laguna en Traveler.es. Un buen y extenso texto, que recoge la esencia del trabajo de Flor García y Franchesko Vera, pero sin explicar en absoluto qué es eso del sabor neobaturro.
Aunque también aparecen noticias más seria. Por ejemplo, las relacionadas con iris Jordán, que sigue dando de qué hablar en los medios, en este caso con una interesante entrevista con los señores de la Guía Michelín,
O la presencia del Enate Merlot Merlot 2021, que es uno de los siete seleccionados por La Vanguardia en su reportaje 8 vinos de variedades internacionales que deberías probar.
¿Seguirá vivo el Salón?