La calidad de las uvas conseguidas ha sido muy buena para poder elaborar los mejores vinos de esta añada
Al principio de la vendimia, Bodegas San Valero anticipó una disminución del 11% en comparación con la media de los últimos 5 años. Sin embargo, se enfrentan a un año aún más complicado de lo previsto, con una reducción de la cosecha en más del 35%. La sequía implacable, las altas temperaturas y la climatología adversa han sido los principales obstáculos.
Sus agricultores y el equipo técnico han trabajado incansablemente para superar estos desafíos y la calidad de la uva cosechada en 2023 ha sido muy buena.
A pesar de la adversidad climática, la uva ha alcanzado un estado de madurez óptimo y una salud inmejorable. La ausencia de humedades en los viñedos ha contribuido significativamente a la calidad de la uva cosechada y a la prevención de enfermedades que podrían haber afectado negativamente la producción.
«Esto nos llena de confianza para elaborar los mejores vinos de esta añada, con colores, aromas y sabores que reflejarán la pasión y el compromiso que hemos invertido en cada etapa del proceso productivo. Confiamos en que, a pesar de los desafíos, nuestros vinos seguirán deleitando los paladares de todo el mundo y llevarán consigo la historia de una cosecha que, a pesar de las dificultades, demostró la fortaleza y la pasión que caracterizan a Bodegas San Valero».